domingo, 3 de mayo de 2015

El libro dorado de los Coros Amateurs

Y AHORA SIN IRONÍAS...

 -Cantar en un coro no consiste cantar a la vez, sino en cantar juntos.

-Cuando cantes, no te escuches a ti mismo, escucha a tu cuerda y al resto del coro, porque un coro que canta bien es el que sabe escuchar.

 -Participa en los ensayos y en el trabajo de tu coro con una actitud de dar, no de recibir, y acabarás recibiendo mucho más.

 -Un nuevo compañero es la mejor noticia para un coro. Acógelo, ayúdale a integrarse y aprender lo más rápidamente posible. Nunca lo apartes ni lo aisles en ningún sentido. Tu antigüedad como miembro del coro no te da más derechos que a los que llevan menos tiempo, ni te arma de razón. Tu grado de experiencia servirá para compararte contigo mismo, pero no con el resto de compañeros.

 -Cantar no es una cuestión de edad, sino de actitud y energía.

 -Estás en un coro porque es una actividad que te gusta y te realiza, es una suerte contar con un grupo con el que poder hacerla, así que practícala como tal. 

 -Eres parte de un grupo, de un equipo, sólo será necesario destacar como individuo cuando el equipo (el entrenador) te lo pida. Sé generoso y pon siempre tus cualidades como cantor al servicio del grupo.

 -La estética, tu colocación, la manera de salir y entrar al escenario o los movimientos durante el canto también son aspectos importantes e identificativos de los grupos. No faltes a éstos ni los consideres secundarios.
El espectáculo comienza en el preciso instante en que el primer cantor pone un pie en el escenario. Haz que el espectáculo comience bien.

 -Si tu director te pide que aprendas algo de memoria, es porque lo considera realmente necesario. Continuar con partituras significa que aún no conoces la pieza y, por lo tanto, no podrás interpretarla en el escenario. 

-Tómate en serio los calentamientos. Aunque no lo llegues a notar inmediatamente, tu salud vocal y tu calidad como cantante están en juego. 

 -"El cantor no debe deslumbrar: debe alumbrar" Atahualpa Yupanqui. 

 -Si quieres ser un buen cantor, cuídate como tal. Los deportistas amateurs también cuidan su físico y tienen cuidado de no dañarse su cuerpo para poder realizar su actividad lo mejor posible. 

  -Siempre se puede aprender y mejorar. Participa con ese ánimo en todas las actividades formativas que organice tu coro, incluso procúrate tu propia formación musical y canora fuera del grupo, aportando después tu experiencia y conocimientos adquiridos a tu grupo.

-Sé disciplinado y practica todos los días un ratito. No esperes al día antes del ensayo para estudiar todo lo que deberías haber hecho durante una semana.

-El lápiz es el mejor amigo del músico. "Más vale un lápiz corto que una memoria larga". "Yo confío en mis coristas, pero no en su memoria".

-Las partituras plastificadas son un engorro para las anotaciones.  

 -Cuanto más estudies las obras antes y después de ensayarlas, mejor te irá a ti y a tu grupo. El ensayo no es el momento de estudiar las obras, es el de trabajarlas; además de entrenar la voz y el sonido. 

 -Si limitamos nuestro nivel de exigencia al que percibamos del resto de compañeros, el nivel de exigencia del coro tenderá siempre a la baja (seguramente por un problema de percepción). Exígete siempre lo mejor de ti mismo y el nivel del grupo siempre irá en alza. 

 -Si faltas a un ensayo obligarás a tu director y a tus compañeros a repetir su trabajo cuando vuelvas. Procura para entonces haberte informado de qué se ha trabajado en tu ausencia y qué indicaciones ha dado el director para facilitar su trabajo, el tuyo y el del grupo. 

 -La actitud en los ensayos también puede verse y modificarse en tu postura corporal. Una cosa es estar sentado y otra inclinado en el respaldo. Una cosa es mirar la partitura y otra agachar la cabeza, el atril es una magnifica herramienta pero tampoco para esconderte tras de él. [Johan Duijck decía: “recostarse es el primer paso para morirse”].

NOTA: Muchas de estos consejos están extraídos de El libro dorado de los Coros Aficionados. Yo he añadido algunas cosas que me han parecido importantes y he suprimido otras que no me lo han parecido tanto.

1 comentario:

Sandra Pianigiani dijo...

Puedo agregar los míos?

Un concierto sin un coreuta es como una sonrisa sin un diente
No hay obras sabidas, hay obras ensayadas...(Mtro Saccente).
Apenas se deja de ensayar una obra se empieza a desmoronar..
Cuando empezamos a cansarnos de repetir la obra, el público empieza a apreciarla.
Cantemos como protagonistas, no como espectadores..
Piensa y luego canta...
Conduce siempre siempre, no pongas el piloto automático.
No te preocupes por como cantan tus compañeros, el director está para eso..
Pon siempre buena onda.El trabajo serio admite la risa..
Estudiar en tu casa te puede hacer un mejor cantante pero no un mejor coreuta.
Mira al director, si estás inseguro él te conducirá.. si el director está inseguro, escucha a la orquesta o al pianista, si están inseguros escucha a tus compañeros y no te despegues de ellos, si están inseguros, busca otro coro, estás en el lugar equivocado...
Cantar en un coro adelgaza: entre las llegadas a casa después de la hora de la cena, los ensayos y los conciertos te pueden hacer perder peso..mientras estás cantando no estás comiendo...
Cuando llegues tarde al ensayo no saludes.. no arruines el clima..El coro es la salida más rápida para ser artista.. con muy poca preparación y mucha asistencia se pueden hacer trabajos maravillosos, estar en los escenarios y ser aplaudido.. Es muy reconfortante..
Si puedes cantar tienes un talento... y el talento viene abrochado a una deuda, que es el esfuerzo por desarrollarlo.. paga tu deuda, desarrolla tu talento, si no lo haces no podrás dormir y no serás feliz hasta que lo hagas...